El Ajuntament de Alcúdia volverá a conceder a partir de octubre licencias de obra en las urbanizaciones de Bonaire y el Mal Pas pese a que carecen de alcantarillado. Podrá hacerlo como mínimo durante un año previa adopción de un acuerdo de pleno. Transcurrido ese plazo requerirá del visto bueno del Consell de Mallorca para que la medida tenga carácter definitivo.
La Comissió Insular d'Ordenació del Territori i Urbanismo aprobó este viernes un informe técnico que advierte al Consistorio de que precisa justificar de forma más exhaustiva el coste de implantación, mantenimiento y explotación de los sistemas de fecales de cada una de las parcelas y solares antes de que el Consell dé el visto bueno al cambio normativo.
El Ajuntament de Alcúdia será el primero de Mallorca en acogerse a esta medida excepcional ahora regulada mediante la aprobación de la Ley de Impacto Ambiental aprobada el pasado jueves y es que el Consistorio alcudienc se acogió hace ya meses a una disposición adicional de la LOUS (Ley del Suelo) para aprobar inicialmente un cambio en su normativa urbanística casi idéntico al que prevé la Ley de Impacto, de modo que «no será exigible la existencia de red de alcantarillado en Bonaire, Paradís de Bonaire, Pinares de Bonaire y el Malpas. Las fosas sépticas que se instalen tendrán que cumplir con lo establecido en el Pla Hidrológic de les Illes Balears que exige que sean estancas».