Después de cinco años de cerrar el convento de las monjas de la Caritat de Son Macià (Manacor), la comunidad religiosa lo ha puesto a la venta por un valor de 570.000 euros. Se trata de seis solares en el centro del pueblo con un total de 1.200 metros cuadrados en los que se sitúan la casa convento y las viejas escuelas de infantil. La decisión de las religiosas ha generado opiniones disconformes entre los ciudadanos de la localidad que consideran que el convento es propiedad del pueblo y no de las monjas.
En 1939 un grupo de familias del llogaret de Manacor consiguieron fundar un convento para las Germanes de la Caritat de Sant Vicenç de Paül. En un principio alquilaron la casa para que se pudieran instalar. Al cabo de dos años, doce personas de la localidad compraron dicha casa y los solares para que las monjas pudiesen vivir en Son Macià y atender así las necesidades medicas y escolares de la población.
Además de la compra del convento y los solares por parte del pueblo, en gratitud por la labor de las religiosas, los habitantes han colaborado siempre con la comunidad.
Ahora los vecinos de Son Macià no entienden como desde que se cerró el convento las monjas de la Caritat han mostrado su rechazo una y otra vez a ceder el local para las asociaciones del pueblo. Incluso se les pidió que pudiera albergar a los escolares para que no tuviesen que trasladarse hasta Manacor durante el tiempo que dura la reforma de la escuela.