La polémica está zanjada después de que el Ajuntament consultara a los vecinos y haya decidido que no haya terrazas en el Carrer Nou de Sant Pere, un lugar en el que nunca antes las había habido.
El Partido Popular, en la oposición, había denunciado que hacía más de un año que un establecimiento de esta calle había instalado una terraza con el consentimiento del Consistorio. Denunciaba también que otro establecimiento había recibido autorización verbal, por lo que había invertido en mesas y sillas para colocarlas en el exterior.
Los ‘populares' achacan la responsabilidad al Ajuntament y aseguran que la consulta vecinal no le exime de sus competencias. Añaden que «no pueden excusar sus decisiones detrás de los vecinos, generando un conflicto entre ellos, esta es una manera ‘marrullera' de esconder sus responsabilidades».
Consulta
Los conservadores creen que para una consulta de este tipo debía de haber participado todo el municipio y no solo los vecinos de la calle afectada.
Desde el Ajuntament señalan que la decisión de los vecinos fue por una mayoría importante y que estos habían expuesto que se daban problemas de ruidos y molestias por las terrazas en un lugar en el que antes no las había.