El alcalde de Lloseta se reunirá la próxima semana con dirigentes de la Conselleria de Medi Ambient para activar el proyecto para aprovechar el agua depurada para riego. Es una de las medidas que el Consistorio baraja para afrontar la sequía.
El uso de este agua para riego está aun lejos de ser una realidad. Tolo Moyà, el alcalde, explicó que antes habría que poner en marcha el tratamiento terciario e instalar unos nuevos filtros con el objetivo de que el agua depurada tenga la calidad suficiente.
La Administración se ha esforzado a lo largo de los últimos lustros para que se aprovechara el agua depurada. La UE ha subvencionado estas iniciativas. Pero hay que cumplir ciertos requisitos para poder obtenerlas, como por ejemplo la existencia de una comunidad de regantes asociada a la inversión. En Lloseta esta comunidad de regantes todavía no se ha constituido.
Por otra parte, el Ajuntament ha solicitado a la empresa CEMEX que le permita interconectar las dos balsas del Clot de s'Argila, propiedad de la fábrica de cemento. Moyà indicó que conectándolas podría incrementerse el caudal que se destina a la red pública de agua de riego y que da servicio a unos 400 abonados.