El segundo chiringuito de Son Serra, el promovido por un particular junto a la llamada Platja Petita, sigue su tramitación administrativa a la sombra de la polémica que rodea el proyectado por el Ajuntament de Santa Margalida en la desembocadura del torrente de na Borges.
A diferencia de este último, el segundo chiringuito se instalaría en un solar urbano en el que los usos comerciales están permitidos por la normativa, pero que precisa la autorización del Consell de Mallorca al estar parcialmente protegido por la ley de Costas.
El promotor de este chiringuito es Jaume Mandilego, un vecino de Can Picafort. Mandilego registró el proyecto ante el Consistorio el 23 de marzo y éste lo remitió al Consell el 31 del mismo mes. Ahora se espera que el Consell le conceda la autorización.
Según apuntó una fuente y confirmó Joan Monjo, el solar en qué se ubicará es propiedad de un pariente de Monjo, teniente de alcalde de Santa Margalida y abanderado del chiringuito de na Borges, y también de otra persona. El promotor contaría con el visto bueno de los copropietarios para abrir el negocio, al parecer. En el proyecto no consta que se vaya a hacer un chiringuito playero sino una cafetería. Parte de las dependencias serían de obra fija. La normativa municipal ampara su construcción, de modo que podría abrir próximamente.