Cala Millor ha sido objeto de una serie de remodelaciones para ofrecer a los turistas una zona más atractiva de cara a la próxima temporada.
La calle Sant Jordi, una zona peatonal donde se ubican un gran número de establecimientos comerciales así como de restauración, ha visto renovado su pavimento, como solicitaban hace ya años empresarios y vecinos de la zona. Así lo manifestó el regidor de Urbanisme, Antoni Servera, quien explicó que la actuación ha consistido en «pavimentar de nuevo la zona, sustituir todo el alumbrado público y el mobiliario urbano, farolas, bancos y papeleras. También se han eliminado las barreras arquitectónicas».