Después de que el pasado mes de noviembre el Ajuntament de Campos y los usuarios de los aparcamientos de Can Pere Ignasi se uniesen para reclamar y exigir a la empresa concesionaria, Aparcaments sa Plaça SL, una solución al estado de abandono y dejadez que presenta todo el complejo, hace unos días el Ajuntament ha procedido a cerrar el párking subterráneo con un decreto en base a las múltiples deficiencias que presenta el aparcamiento. Ahora el informe del Consell Consultiu para después, muy probablemente, iniciar una batalla jurídica contra la empresa concesionaria.
El alcalde, Sebastià Sagreras, señaló, antes del cierre, que «el arreglo de los desperfectos puede suponer para la empresa concesionaria unos gastos millonarios, además del correspondiente expediente sancionador».
El complejo está formado por dos pisos de aparcamientos, con 76 puestos cada uno. La degradación en los últimos años ha sido constante, y ahora, se había llegado hasta el punto de que no había luz en todo el aparcamiento, pero sí goteras y suciedad, la puerta de acceso estaba rota, faltaban extintores y los pocos existentes habían caducado hace más de diez años.