Los cazadores de Alcúdia se sienten víctimas de un montaje con el que presuntamente se trataría de justificar una ampliación del nivel de protección de Maristany que supondría la prohibición de la caza en buena parte de su coto legal. El presidente de los cazadores de Alcúdia, Jaume Buades, negó este martes tajantemente que se haya denunciado a un cazador de Alcúdia por capturar dos aves protegidas (becs vermells) el pasado sábado en la zona, tal y como denunció el GOB.
La denuncia cursada por el agente de medio ambiente a instancias de dos miembros del GOB el sábado pasado habla exclusivamente de un incumplimiento por el uso de un arma indebida. El presidente de los cazadores niega que se mataran ejemplares protegidos y asegura que su socio no superó tampoco el número de capturas máximas. «Todo es un montaje porque quieren proteger. Nuestro socio cazaba dentro del coto y solo capturó un coll blau, una fotja y una perdiz. Es una persona experimentada y que conoce bien las especies. Se le denunció porque la escopeta permitía más de dos disparos consecutivos», dice.
Jaume Buades desconfía de que la denuncia del sábado partiera de dos socios del GOB (al menos uno de ellos directivo) y, ante la falta de pruebas, pone en cuestión los motivos reales de la denuncia.