Una treintena de bares convencionales podrán organizar bingos esta Navidad, según informó el Govern. Se trata de una cifra todavía provisional, puesto que «aun vamos recibiendo solicitudes» de nuevos locales, explicaron fuentes de la Direcció General de Comerç i Empresa, el organismo que emite los permisos.
Los locales que organizarán los bingos se encuentran «en varios sitios de la geografía de las Illes Balears, en algunos de ellos con un fuerte arraigo tradicional», puntualiza el Govern. La comarca del Raiguer en su conjunto, algunos pueblos del Pla y otros municipios de la Serra de Tramuntana son zonas en que es habitual pasar alguna velada en el bar jugando a bingo.
Aunque las solicitudes siguen creciendo, la treintena de locales que han pedido permiso este año contrasta con los cerca de cincuenta que el año pasado organizaron bingos. La tradición de celebrar bingos por Navidad corrió peligro hace dos años a raíz de la ley del juego vigente entonces, que no los reconocía ni les otorgaba cobertura legal, y de ciertas denuncias de locales de juego –es decir, con licencia expresa para organizar bingos, sometidos a una fiscalidad especial– ante la policía. El malestar que se generó entre los propietarios de locales que llevaban años celebrando bingo fue notable. Entonces el Parlament, que tramitaba una nueva ley del juego, aprobó una excepción para reconocer la tradición.
Las autorizaciones concedidas este año se tramitan al amparo de esa modificación legislativa. El Govern requiere a los interesados que lo comunicaran previamente, que se limiten a celebrar tres partidas en todas las fiestas y que informen del horario aproximado del juego, del precio del cartón y del importe destinado a premios. Por ley, los organizadores de este tipo de bingos no pueden buscar lucrarse con las partidas de Navidad.