El Ajuntament de Inca informó, este viernes, a los representantes de la empresa Dragados de su intención de rescindir el contrato y reclamarle los 2,4 millones de euros que debían llegar de la ayuda europea y que se han perdido debido a la paralización de las obras de reforma del Teatre Principal hace más de un año por parte de la empresa.
Así lo dijo el alcalde Virgilio Moreno, que ha convocado al patronato de la Fundació del Teatre Principal para el próximo martes. En dicha reunión también se hablará de la falta de acuerdo entre la institución y la empresa sobre la liquidación de las obras realizadas. «Existe una diferencia de 280.000 euros entre lo que dictan nuestros técnicos y lo que reclama Dragados», dice el alcalde, que añade que «los precios son contradictorios y nosotros queremos pagar lo que toca, no lo que dice la empresa».
El equipo de gobierno de Inca ha tomado esta decisión después de conocer el informe jurídico en el que responsabiliza a la empresa de paralizar las obras de reforma en el mes de noviembre de 2014. En dicho informe se deja claro que «la empresa no tenía justificación alguna para abandonar la obra, sino que tenía la obligación de continuar». Así las cosas, la Fundació también reclamará daños y perjuicios a Dragados y el caso terminará en el juzgado.
Paralelamente a la vía judicial, el Consistorio avanza en el proceso para volver a licitar las obras de reforma del edificio con el claro objetivo de «terminar las obras y conseguir que el Teatre Prinicipal esté en funcionamiento durante esta legislatura», según Moreno.
Actualmente existe un 20 por ciento de la obra ejecutada y el nuevo proyecto debe excluir estas actuaciones ya llevadas a cabo y otras «pequeñas modificaciones que queremos incluir», dijo el alcalde. Además, también se gestiona la posibilidad de conseguir una partida de la linea de los fondos FEDER prevista para los años 2014-2020, aunque el mismo alcalde ve complicado poder conseguirla.