Unos 82 alumnos de un colegio de Manacor, de entre 9 y 11 años, salieron este viernes de excursión en tren hasta Palma para visitar los principales belenes de la ciudad. Lo que en principio era una salida tranquila acabó siendo toda una aventura. Y es que la mayoría de ellos tuvieron que realizar el trayecto, de una hora aproximadamente, de pie al no haber asientos suficientes para todos los pasajeros. Pese a que los profesores habían avisado de la excursión y del número de alumnos previstos, desde Serveis Ferroviaris de Mallorca (SFM) no se tomó ninguna medida al respecto y los menores, tanto en el viaje de ida como en el de vuelta, hicieron el recorrido de una manera incómoda.
Padres y profesores mostraron su indignación ante esta «falta de sensibilidad de los responsables del transporte público». Así, consideran que «lo normal es que hubieran añadido un vagón más para evitar esta situación».
La salida se hizo en el tren de las 9,15 horas. Al haber overbooking muchos de los niños no pudieron sentarse. Además, cuando llegaron a Inca subieron al tren otros 50 alumnos más.
Desde Serveis Ferroviaris de Mallorca (SFM) manifestaron tener conocimiento de esta excursión y lamentaron las molestias que se hubieran podido ocasionar. Fuentes autorizadas del Govern explicaron a este periódico que «hay que tener en cuenta que el tren es un servicio público abierto a todo el mundo. Los inspectores intentaron en todo momento que el servicio fuera lo más cómodo posible. Su misión es garantizar la seguridad de los pasajeros».