El regidor de Medi Ambient de Valldemossa, Antoni Colom, partió el domingo con unas tenazas la cerradura que una vecina había dispuesto en una barrera que cruza el Camí de s'Escolta, una vía de titularidad pública. La vecina que había dispuesto la cerradura se echó atrás tras una conversación con dicho regidor y le facilitó las tenazas para que abriera el camino.
Un grupo de excursionistas dirigidos por Joan Carles Palos recorrió el domingo el Camí de s'Escolta, una vía que conduce a seis miradores de la Ruta de l'Arxiduc. La excursión transcurrió sin incidentes hasta Sa Torre, donde apareció la barrera, cerrada.
Los excursionistas trataron de convencer a la propietaria de la parcela para que abriera, pero ésta se negó. Entonces Joan Carles Palos llamó al alcalde de Valldemossa para avisar del incidente. Este delegó en el regidor Antoni Colom, que enseguida acudió para aclarar lo ocurrido. La propietaria, por su parte, llamó a la Policía Local, que también se desplazó al lugar. Finalmente, la propietaria, tras dialogar con el regidor, le dio unas tenazas para que rompiera la cerradura. «Había perdido la llave», puntualizó el concejal Colom.
El Camí de s'Escolta es una vía de titularidad pública que ya aparece documentada del siglo XVI. Era una ruta para la vigilancia nocturna de la costa: los vigilantes escoltaven (ya que en la oscuridad no veían nada), según explicó Palos. El derecho de paso por el Camí de s'Escolta se había deteriorado los últimos 50 años. Había dejado de respetarse. Recientemente, el Ajuntament lo ha restaurado.