La huelga de carteros que se inició en Binissalem el pasado jueves amenaza con extenderse a toda la Part Forana. Luis Camarero, delegado sindical de la Confederación General del Trabajo (CGT), explicó este lunes que han pedido al resto de municipios que se sumen a la protesta que, una vez agotada la vía de negociación, busca una solución a los recortes de personal que están provocando un recorte en la calidad del servicio.
Camarero explica que «haremos un llamamiento a la Federación de Municipios para impedir que se elimine el servicio en los núcleos diseminados de población a partir del próximo 4 de enero». Los carteros denuncian que Correos suprimirá a partir de esa fecha el reparto en las zonas diseminadas de municipios como Llucmajor y Felanitx, donde los vecinos que quieran disponer de un buzón tendrán que recurrir a la compra de buzones colectivos.
Los recortes de personal (no se sustituyen las vacaciones y bajas) han afectado especialmente a Binissalem, donde solo hay cinco carteros en plantilla y dos en activo. Allí fue donde la semana pasada el personal optó por un paro colectivo.
Los carteros han pedido al alcalde Jeroni Salom que medie ante Correos para buscar un acuerdo que satisfaga a todas las partes y no implique un recorte de servicios.