Los alcaldes de diez municipios de la Serra de Tramuntana –Esporles, Banyalbufar, Estellencs, Andratx, Deià, Sóller, Fornalutx, Escorca, Pollença y Valldemossa– se reunieron este jueves en esta última localidad para consensuar una postura única contra las carreras ilegales de motos en las carreteras de la comarca.
Los ediles decidieron emplazar a la Delegación del Gobierno para que tome medidas en este asunto, aumentando la presencia de patrullas de Tráfico en la zona. Algunos municipios, como Sóller y Fornalutx, se ven especialmente afectados ya que la «subida» contra reloj al Puig Major es una de estas «pruebas» más habituales.
Todos ellos dejaron muy claro que no están en contra de las motocicletas sino solamente de «las conductas temerarias y peligrosas para el resto de usuarios».