El alcalde de Santa Maria, Colau Canyelles, propone adquirir Can Petit, el casal anexo a la casa consistorial, para ampliar las dependencias municipales. El pleno debatirá el jueves y aprobará –si procede, ya que MÉS gobierna en minoría– la adquisición.
Canyelles señala que la compra de Can Petit (también conocido com la Posada de Son Llaüt) permitirá solventar los problemas de falta de espacio e iluminación que padecen los trabajadores en la casa consistorial actual y adaptarla a las necesidades de las personas con movilidad reducida. El edificio histórico del Ajuntament está declarado BIC y no es posible instalar un ascensor ni hacer reformas de calado.
El arquitecto ha tasado Can Petit en 1,2 millones de euros, lo mismo que lo que pide su propietario.
El portavoz de Movem avanzó que votará en contra al parecerle «una barbaridad» el precio de la compra. Por su parte, Andreu Jaume, portavoz del PP, expresó sus dudas sobre la idoneidad de la operación.