«Esperemos que poco a poco Cala Rajada pueda ofrecer su mejor aspecto cultural a visitantes y turistas. Tenemos las esculturas de Joan Bennàssar y la idea es que cada año venga un artista reconocido y deje su huella en esta zona». Con este deseo inauguraba el pintor Gustavo, acompañado de sus amigos, patrocinadores y autoridades, su segundo mural en el espigón del muelle de Cala Rajada. De este manera el núcleo costero enriquece su patrimonio y se adelanta hacia una promoción cultural de la zona.
El acto contó con la actuación de jóvenes músicos de la escuela de Capdepera. La nota de humor la puso el actor Toni Gomila con un monólogo en inglés y catalán que alabó las virtudes de la obra del «artista incomparable que ha devuelto los colores y la alegría a este muelle y lo ha dejado plasmado para las futuras generaciones».
El mural de grandes dimensiones, 16x4 metros, ha sido posible gracias a la esponsorización privada de empresas y asociaciones. En esta ocasión es de color azul y pretende ser un homenaje al mar. Está ubicado junto al primero, de color verde, en homenaje al campo.