El Club Náutico del Port de Pollença da por finalizada la crisis interna desatada en abril de 2014 que provocó una moción de censura que catapultó al inglés Allan Ponte como nuevo presidente. Los socios se reunieron este sábado en asamblea y acordaron aprobar la liquidación de cuentas del club del ejercicio 2013, los presupuestos de 2014 y un avance de los presupuestos para 2015.
El presidente del club, Allan Ponte, informó que los socios han dado también «libertad» a la nueva directiva para volver a negociar con el Govern de les Illes Balears una prórroga de su concesión que les permita gestionar las instalaciones hasta 2018.
La directiva negociará ahora con el Govern balear la posibilidad de seguir gestionando el club más allá de esa fecha. El acuerdo pasa por aceptar una revisión del canon anual, aún por determinar.
Ponte se mostró «entusiasmado» ante el apoyo mayoritario de los asistentes. Acudieron a la reunión cerca de 70 socios. «Ha sido un gran placer y una satisfacción recibir el aplauso de los socios», sentenció Ponte.