Consell vivió la XVIII edición de la Fira de Tardor que llenó las principales calles del pueblo de ambiente y gente que podía encontrar en el municipio cualquier producto artesanal. La plaza Major y sus calles más próximas acogieron el Gastroví, donde se pudieron degustar tapas acompañadas por los vinos que se sirvieron en la XII feria del vino local.
Un total de 13 establecimientos locales ofrecieron tapas a tres euros y raciones a 5 euros de platos típicos mallorquines como el frit de mè o sopes de matances.
Al mediodía, la atención se trasladó hasta el aparcamiento del campo de fútbol, donde se celebró un espectáculo medieval con caballos, halcones y personajes de la edad media a cargo de la compañía Fantasias Espectáculos.
Por la tarde, se celebró la décima excursión a pie hasta la viñas de Can Ribas, donde se ofreció una merienda. La feria terminó por la noche con una muestra folclórica a cargo de la agrupación Sociedad Anónima de Consell.