Una representación de Santa Margalida y otra de Muro han viajado a Madrid para exponer ante el subdirector general de Infraestructuras del Ministerio sus razones a favor y en contra de la construcción de la nueva planta depuradora en Can Pifort.
La delegación murera la formaban el alcalde, Martí Fornés, el teniente de alcalde Joan Escalas, el secretario, Xisco Sabater, y el ingeniero municipal, Manolo Velasco. La representación vilera la componían el alcalde, Antoni Reus, la teniente de alcalde Beatriz Gamundí, el teniente de alcalde Joan Monjo y el técnico de Medio Ambiente, Toni Nadal.
Los primeros en reunirse con el subdirector general de Infraestructuras, Antonio J. Alonso Burgos, fueron los murers, que insistieron en que la depuradora se debe hacer «urgentemente» y que la planta actual, la de Platja de Muro, no puede ampliarse al junto a espacios naturales protegidos.
Los dirigentes vilers, trataron de convencer a los responsables del Ministerio de que la ampliación de la depuradora actual es la «mejor opción para el medio ambiente» y que «no supone consumir más territorio».
Ambas delegaciones se mostraron satisfechas tras las sendas reuniones.