El pago de elevadas tasas catastrales en Porreres ha generado malestar entre los vecinos.
La última revisión catastral del municipio se realizó 2010, provocando que el valor actual este muy por encima del precio de mercado. El elevado valor de los inmuebles ha generado multitud de reclamaciones al Ajuntament.
En unas semanas más de cincuenta familias han acudido a las oficinas municipales quejándose del actual valor catastral.
Ante esta situación el Ajuntament reclamará una revisión de los valores de los inmuebles más actual, que en un principio deberá realizarse en 2016.
La alcaldesa, Francisca Mora, explicó distintos casos como «vecinos de la misma calle con casas de dimensiones muy similares y que uno paga mucho más que el otro». Otras quejas vecinales son por simples errores de la oficina catastral.
Otras de las quejas que llegan al Ajuntament hacen referencia a los elevados gastos que suponen estas tasaciones para las herencias de parientes lejanos, lo que ha llevado a un aumento de las renuncias a la herencia.