La batalla entre Sorea y el Ajuntament d'Inca por la no privatización del servicio de agua llega ahora a los tribunales de justicia.
Ayer se supo que la empresa Gestió d'Aigües d'Inca (vinculada a Sorea) ha interpuesto un recurso contencioso administrativo (en los juzgados) contra el acuerdo de pleno del 25 de abril que descartó definitivamente la externalización del servicio y negó a Sorea otras pretensiones ligadas al contrato.
Se debe tener en cuenta que el Consistorio inquer estuvo a punto de adjudicar el suministro de agua a Gestió d'Aigües d'Inca, pero en el último instante dio marcha atrás. Entonces, Sorea formuló un recurso administrativo en el que alegaba que la renuncia del Ajuntament a la privatización no se produjo dentro del plazo legalmente previsto y estimaba que se había vulnerado el procedimiento. Señalaba asimismo que «el cambio de criterio de la Administración no es una causa de interés público que ampare la renuncia a la celebración del contrato» y, por todo ello, pedía la nulidad del acuerdo que descartó la privatización.
El Consistorio rechazó estos argumentos y Sorea, ahora, ha presentado un recurso ante los tribunales, por lo que será un magistrado el que finalmente interprete si la forma de proceder del Consistorio se ajusta o no la legislación.