La Fiscalía de Medio Ambiente ha abierto diligencias para esclarecer si la instalación de una antena en lo alto del Castell d'Alaró se adecua a la legalidad. Esta antena es la que hace dos semanas quedó destrozada al recibir el impacto de un rayo.
Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (SEPRONA) requirieron recientemente al Ajuntament d'Alaró el expediente relativo a la antena, según informaron el alcalde, Joan Simonet, y Mateu Marcús, el presidente de la fundación Castell d'Alaró. La fundación la integran el Ajuntament, el Obispado y el Consell de Mallorca.
En otra ocasión, los agentes tomaron fotografías de la antena ahora fulminada.
Simonet y Marcús coincidieron en explicar que dicha antena está «en proceso de legalización». La instalación está dada de alta en la Comisión Nacional de Telecomunicaciones y tiene el permiso del Govern, pero le falta la licencia de actividad, un trámite que requiere la autorización del departamento de Patrimoni del Consell de Mallorca, indicaron.
Intereses de empresas
Dos días después de que cayera el rayo, la empresa de telecomunicaciones Ib-red denunció en los medios de comunicación que los destrozos causados se debían a la instalación de esa antena repetidora que, a su juicio, es ilegal ya que no cumple las medidas de seguridad exigidas. La compañía afirmaba que había presentado varias denuncias ante el Consistorio pero que no habían logrado que se subsanaran. Señalaban que la antena carecía de pararrayos, que tenía los cables por el suelo y sin protección mecánica, etcétera. En declaraciones a la prensa, un directivo de la compañía denunciaba las «maniobras del Ajuntament d'Alaró y el interés del alcalde en mantener de forma ilegal la antena».
El representante de Ib-red también cargaba contra la empresa de telecomunicaciones que ha realizado la instalación en Alaró. Se quejaba de que daba servicio a unos 600 clientes de ADSL rural y recordaba que en otras zonas protegidas esta empresa también tenía antenas ilegales sin permiso y sin homologar. Decía que ocurría en Randa, Santa Magdalena o Sant Salvador.