Alan Ponte, un ciudadano inglés de 77 años, ultima la recogida de firmas para solicitar la convocatoria de una asamblea extraordinaria en el Club Nàutic en la que tiene previsto presentar una moción de censura y remplazar a Pedro Siquier como presidente del Club.
Alan Ponte presenta su candidatura transcurrido mes y medio desde que se celebró la asamblea ordinaria en la que la junta actual no pudo aprobar la liquidación de cuentas de 2013 ni los presupuestos de 2014.
Algunos socios denunciaron irregularidades contables y amenazaron incluso con presentar una querella y pedir la intervención del club. De nada han servido las reuniones mantenidas desde entonces para encontrar una solución dialogada ante la negativa de algunos miembros de la junta actual a presentar su renuncia.
«Vista la situación aquí en Pollença que está poniéndose cada día peor y es cada vez más perjudicial para el bienestar del club, considero evidente que se necesita algo contundente para romper la crisis de una vez», dice Ponte.
En el caso de que Ponte sea elegido presidente, los estatutos del Club prevén que su presidencia durará hasta el final del mandato corriente (29 de junio de 2016) si bien la intención del inglés es la de, una vez estabilizado el club, proponer en la asamblea general ordinaria de 2015 convocar elecciones anticipadas «a fin de restaurar a los socios, si ellos lo quieren, su derecho fundamental a elegir la candidatura que más les conviene para dirigir el club», dice Allan Ponte.
La crisis en el Club Nàutic pasa por un momento especialmente delicado inmerso en negociaciones para prorrogar su concesión buscando a la vez una rebaja en el canon anual.