El Ajuntament d'Inca ha optado por contratar directamente un nuevo contador eléctrico y poder restablecer el servicio de la piscina cubierta de Crist Rei que está previsto que se reabra mañana viernes. Con esta actuación, el Consistorio ha resuelto el problema surgido por el impago por parte del concesionario de una factura de unos 7.000 euros a la empresa eléctrica lo que obligó al cierre de la instalación el pasado lunes.
Por otra parte, fuentes municipales apuntaron a que el Ajuntament gestionará de manera municipal la piscina cubierta a partir de este verano. En lugar de recuperar ahora la concesión, el Consistorio esperará a que finalice el contrato actual, que acaba el 30 de junio, y empezará a gestionar directamente el servicio. El Consistori ha tomado la decisión de esperar a que finalice la concesión con la empresa actual para que los abonados puedan finalizar los cursillos que se imparten actualmente.
Por lo que se refiere al pago de la factura pendiente de 7.000 euros, la empresa concesionaria espera recibir la subvención municipal que tiene asignada anualmente para satisfacerla. El Ajuntament d'Inca ha anunciado que no abonará la factura pendiente con la suministradora de luz.
Desde los partidos de la oposición denunciaron esta semana la mala gestión de la instalación y achacaron el sobrecoste energético a los fallos en la obra, tal y como publicó ayer este diario.
Además, desde el PSOE se pide al Ajuntament que convoque una reunión urgente de la comisión de seguimiento de la concesión. En un comunicado público, los socialistas recuerdan que «el pliego de condiciones de la concesión estipula que se debe convocar la comisión de seguimiento para que se den todas las explicaciones necesarias sobre el presente y el futuro de la instalación».
Actualmente la piscina cubierta de Crist Rei cuenta con unos 300 abonados.