La prolongación de la autopista desde Llucmajor a Campos, con dos carriles en cada calzada y vías de servicio en los laterales, tendrá una anchura aproximada de 47 metros, según confirmaron ayer fuentes del departamento de Carreteres del Consell.
El proyecto definitivo aún no se ha redactado, lo que significa que se desconoce cuál será el trazado definitivo de la nueva vía. Sin embargo, sí se conocen ya algunas de las características técnicas de la obra.
La previsión es que haya dos carriles por sentido de 3,5 metros cada uno de ellos, más dos arcenes interiores de un metro y dos arcenes exteriores de 2,5 metros cada uno de ellos.
El tronco
Las dos calzadas suman, por tanto, 21 metros de anchura, a los que se suman los 10 metros de mediana. Ello implica que la ‘mancha' del tronco central ocupará 31 metros de anchura. Los viales exteriores de servicio, de 7 metros cada uno de ellos, más la separación entre viales y calzada, da un total de 48,5 metros de anchura, aproximadamente.
El Consell ya ha incorporado una partida en los presupuestos de este año para poder comenzar la obra, si bien aún se está a la espera de definir por completo el proyecto. Uno de los asuntos más complicados será cómo se resuelven los accesos a Campos una vez finalizada la parte central del desdoblamiento.