La Navidad es temporada alta en la hospedería del Santuari de Lluc. Cada año son más las familias que eligen el santuario para pasar las fiestas, especialmente entre el 20 y el 26 de diciembre. El tradicional canto de la Sibil·la es uno de los principales atractivos para pasar la Nochebuena en Lluc y aunque la demanda desciende pasado el 26 de diciembre la hospedería se encuentra aún hoy a un 50 por ciento de su capacidad.
«Ahora estamos aproximadamente a un cincuenta por ciento de capacidad, nada que ver con la víspera de Navidad», explica el gerente de la hospedería, Sebastià Sureda. Casi 500 personas siguieron en directo el canto de la Sibil·la la Nochebuena. «De ellas entre 200 y 225 personas se alojaban en la hospedería», añade.
Reservas
Este año muchas familias adelantaron sus reservas al viernes 20 de diciembre prolongando así su estancia navideña. Hay quienes disfrutan del fin de semana en Lluc y pernoctan en la hospedería para asistir al ensayo del canto de la Sibil·la y después pasan las fiestas propiamente dichas con su familia en sus respectivos municipios. Otros optan por prolongar su estancia hasta día 26.
«Esta semana las reservas ya descienden y estamos a un 50 por ciento y la cosa irá bajando conforme se acerque la fiesta de Reyes que la gente acostumbra a pasar ya en sus municipios donde van a ver la Cabalgata», dice el gerente.
La Hospedería de Lluc ha emprendido en el último año un progresivo proceso de modernización con el objetivo de mejorar su oferta y hacerla más atractiva para residentes y turistas. Así, por primera vez este invierno, la mayor parte de las habitaciones disfruta de un nuevo sistema de climatización durante las 24 horas que funciona con una caldera de biomasa que permite además dar una salida a todos los restos forestales que dejó el cap de fibló en 2012.