Juan Antonio Amengual llegó hace cuatro años al Santuari de Lluc procedente del sector de la hostelería con el objetivo de dinamizar la hospedería adaptándola a las necesidades del siglo XXI. Su principal objetivo era entonces abrir la hospedería al mundo a través de los touroperadores y de la web pero el cap de fibló de 2012 y el posterior incendio de una de las habitaciones fue el punto de partida para impulsar un plan de mejoras que comienza a dar sus frutos.
La temporada estival 2013 ha dado mejores cifras de ocupación en la historia de la hospedería y Amengual confía en mantener la tendencia.
Antes la mayoría de habitaciones tenían camas de 1,35 metros. Ahora son dobles superiores, con colchones nuevos. Incorporan neveras en las habitaciones y pequeños detalles como jabones en los baños sin perder la esencia de la hospedería. Colchas y cortinas adoptan el azul como color cooperativo en consonancia con los vestidos de los Blauets.
Las viejas cerraduras de las habitaciones se sustituyen por cerraduras con tarjeta, se ha instalado un ascensor, habilitado una habitación para discapacitados y renovado la climatización.