El Govern autonómico firmó ayer el acta de recepción de las obras del puerto deportivo de Can Picafort, según pudo saber este periódico. Esa firma cierra administrativamente unas obras que comenzaron a finales de los años 70 y que sobre el papel debieron de haber finalizado en los 80, pero la falta de dinero primero y los litigios judiciales después las retrasaron.
El grueso del muelle de Can Picafort (los pantalanes y demás infraestructuras pesadas) se hicieron en la década de los años 80. Pero al poco faltó dinero y las obras se pararon. Años más adelante, el club náutico cedió a una empresa (Puerto Deportivo de Can Picafort) la gestión de los amarres del muelle con la condición, entre otras, de que terminara las obras pendientes, pero tampoco se hicieron. Entonces el club náutico demandó a la empresa, y la justicia le dio definitivamente la razón (en el sentido de que recuperaba la concesión) en 2011.
Estos últimos tres años se ha construido un edificio social (que incluye un restaurante y las oficinas del club náutico), se han levantado unos almacenes y se han hecho mejoras en el sistema de drenaje, además de otras mejoras. En total habrá costado unos 550.000 euros, pagados únicamente por los socios.
El titular del puerto es Ports de les Illes Balears. En régimen de concesión, lo gestiona el club náutico.