«Histórico». Éste fue el termino más utilizado ayer en Sant Joan. La Assemblea per Sant Joan (AxSJ), un partido local vinculado a la izquierda nacionalista, cogió ayer en las manos de Catalina Gayà la vara de mando de la localidad en cumplimiento del pacto firmado a comienzos de legislatura con el Partido Popular del hasta ayer alcalde Joan Magro.
La sala de plenos de la pequeña localidad del Pla se llenó de vecinos deseosos de asistir a un acto que desde la segunda República no se producía en la localidad: tener una primera vara de carácter progresista. Y es que desde entonces todos los alcaldes formaban parte de partidos llamados de derechas. Tan solo durante unos años, con UM en la alcaldía, un regidor del PSM formó parte del equipo de gobierno. Es por ello que al ser elegida Gayà la sala estalló en una ovación pocas veces sentida en Sant Joan.
Joan Magro se despidió agradeciendo el trabajo de sus colaboradores y «la lealtad y el apoyo de la Assemblea en un pacto en el que hemos priorizado el trabajo para el pueblo de Sant Joan, con transparencia, consenso y lealtad». Magro se emocionó al repasar el trabajo realizado y al recordar el apoyo ofrecido por su esposa y familia.
Gayà también empezó su parlamento recordando a su marido que se encuentra hospitalizado. El trabajo, la lealtad y el seny también fueron los pilares que esgrimió Gayà para llevar a buen puerto el pacto firmado con una formación tan distante de la suya. «Continuaremos trabajando para Sant Joan, con espíritu democrático y potenciando nuestra lengua y cultura». La nueva alcaldesa, que tendrá ahora la dedicación exclusiva, invitó a los dos grupos de la oposición, CxI y PSOE a trabajar juntos para el pueblo.
Entre los asistentes estaban Joan Rotger y Jeroni Salom del PP, y Joan Font, Toni Alorda o Catalina Mas por el PSM.