Alrededor de 500 personas se congregaron ayer por la tarde en la playa de sa Ràpita para formar un mosaico humano para clamar la protección de este entorno natural, así como mostrar el rechazo a «las políticas que especulan sobre el territorio». Hubo una gran movilización y al final se consiguió el objetivo: reproducir sobre la arena el logotipo de la plataforma Salvem sa Ràpita con el dibujo de una concha y una estrella.
La cita era sobre las 18.00 horas frente al Club Náutico. La plataforma Salvem sa Ràpita había convocado la movilización para «mostrar, una vez más, la oposición a la destrucción de sa Ràpita con la construcción de un macrohotel».
Se instaló una parada con información variada y los interesados en formar parte del mosaico iban apuntándose. Hubo gran interés y se iban acercando poco a poco mayores, niños y jóvenes. Desde la organización se asignaba a cada participante un número y una cartulina y se iban colocando para recrear el logo. Se repartieron, según el GOB, más de 400 cartulinas que eran las necesarias para formar el mosaico. Así lo destacaba la portavoz, Margalida Ramis. «Necesitábamos unas 400 personas para reproducir el dibujo y lo hemos conseguido. Se han sumado incluso más. Hay que agradecer la participación de estos voluntarios en este acto cívico en defensa de sa Ràpita y su entorno».
Ramis recordó que «el 19 de julio tuvimos una alegría con la Sentencia que invalidaba la modificación del Plan Territorial que permitía el Hotel de sa Ràpita pero el Consell anunció que recurriría. Pedimos que dejen de gastar dinero público para defender los intereses de unos pocos».
Asimismo, desde la plataforma recordaron las consecuencias negativas en el sentido que «es un proyecto que genera problemas hídricos, que para nada es de interés general».
Fue una convocatoria totalmente cívica.