El edificio de Can Solivelles ha abierto sus puertas tras la reforma llevada a cabo por el Ministerio de Vivienda y 12 años después de que el Ajuntament adquiriera este antiguo casal. De momento, se ha habilitado una parte del edificio en el que se han trasladado los departamentos de Información, Recaudación, Rentas, Impuestos, Juzgado, Padrón de Habitantes, Intervención y Tesorería.
Según expone el alcalde Jaume Alzamora, «aprovechando este cambio también se llevará a cabo un nuevo proyecto de modernización en la Administración local que afectará, sobre todo, al servicio de atención al ciudadano que se reforzará con más personal y organización del trabajo interno».
El cambio tiene como objetivo mejorar la atención a la ciudadanía y conseguir una mayor eficiencia. En el edificio del Ajuntament quedarán los servicios de Secretaría, Alcaldía, Servicio de Asesoramiento Lingüístico y Urbanismo.