La restauración del Pou Poal de Binissalem empezará esta semana y se prevé que termine en septiembre. Las obras, dirigidas por el arqueólogo Ferran Tarongí, consistirán en la rehabilitación de la pared que rodea la parcela, el empedrado del suelo, el pozo, las dos columnas y la construcción de una acequia que canalice el agua de la lluvia hasta la principal.
El presupuesto de la reforma es de 19.000 euros, de los cuales 16.000 provienen de una subvención del Programa Leader de la Unión Europea, destinado a iniciativas de desarrollo rural.
«Hay gente que no entiende que en tiempos de crisis se hagan cosas como ésta, pero desde el Ajuntament pensamos que antes de ignorar la ayuda, es mejor aportar el resto, 3.000 euros, y conservar el Pou Poal», declaró el teniente de alcalde y regidor de Patrimonio de Binissalem, José Fernández. Fernández opina que «tenemos que conservar el patrimonio que tenemos».
«Queremos que el Pou Poal esté acabado para la fiesta de la Vermada y hacer un concierto de violín», explica José Fernández. El pozo comunal, que data de la época medieval, se destinará, una vez reformado, a actividades culturales como ésta y también a visitas escolares.