El Ajuntament d'Inca se ha cansado de esperar y ahora estudia llevar ante la Fiscalía el expediente de construcción del colegio Miquel Duran i Saurina de la ciudad por las deficiencias que presenta la obra del edificio desde su inauguración en el año 2009 y que «estarían ocasionadas por un proceso deficiente en la construcción del centro educativo», según explican fuentes del Consistorio.
Para poder llevar el caso ante el fiscal, el regidor de Urbanismo y primer teniente de alcalde de la ciudad, Felip Jerez, dio órdenes ayer a los servicios técnicos municipales que inicien la «elaboración de un informe completo de los múltiples desperfectos que se acumulan en el centro». Con esta denuncia, el Ajuntament quiere pedir responsabilidades políticas a las autoridades que presidían el Govern durante la ejecución de las obras que se iniciaron en agosto de 2006 con el Govern Matas y fueron inauguradas en 2009 por el president, Francesc Antich.
Desde la apertura del centro educativo hace cuatro años, el Ajuntament d'Inca, que se encarga del mantenimiento de los centros educativos de la ciudad, ha llevado a cabo 157 intervenciones en materia de mantenimiento en el colegio Miquel Duran i Saurina y ha invertido en el 2012 39.000 euros, cuando el presupuesto para otros colegios por el mismo concepto ha sido de 9.000 euros. Debido a las grandes deficiencias del edificio, el equipo de gobierno de Inca (PP) cree que «podría existir imprudencia y deficiencias en la obra que ni se han justificado ni reparado adecuadamente». Estas reparaciones deben ser ejecutadas por la Conselleria d'Educació del Govern.
El Ajuntament d'Inca ha tomado esta determinación después de no poder asumir el gran número de desperfectos que existen en el edificio del colegio Miquel Duran i Saurina. Cabe recordar que desde la inauguración del centro, el Consistorio ha remitido escritos a la Conselleria solicitando la mejora del centro.