Lo que parecía un sueño se ha convertido en una realidad para una cooperativa de familias, que ha logrado poner en marcha una escuela de educación infantil y primaria en el Camí de sa Fita, en Marratxí, que pretende que los niños se sientan tan cómodos en el colegio como si estuvieran en sus casas.
«Escola Activa de Mallorca convierte a los niños y las niñas en protagonistas de sus propios aprendizajes respetando sus ritmos, necesidades intereses y motivaciones», explica Rebecca Sánchez, presidenta de la cooperativa de familias, quien añade: «La escuela funciona desde este curso, pero la estamos impulsando y está abierta a todas las personas y familias que quieran implicarse en ella y conocer el proyecto».
Sánchez destaca que esta «escuela activa y respetuosa» apuesta por la ecología y el respeto por el medio ambiente, educando en los valores de la sostenibilidad», a partir de una metodología docente «que entiende que los niños y niñas son personas válidas y con experiencias previas y no sólo recipientes vacíos a los que tienen que rellenar de conocimientos».
Este tipo de escuela es novedoso en Mallorca, explica Sánchez, «aunque no en Europa y la península donde hemos encontrado experiencias similares», concluye.