El Govern balear ha informado favorablemente esta semana al proyecto de subsanación de deficiencias del vertedero de Son Terrassa, ubicado en Capdepera.
La conselleria de Medi Ambient ha comunicado al Ajuntament de la localidad que ya tiene todos los permisos para proceder a la clausura definitiva tras años de polémica.
El cierre del vertedero ha de ser una realidad antes del mes de abril porque de lo contrario el Ajuntament tendría que devolver la subvención de 1,3 millones de euros procedentes de los fondos europeos.
Han sido muchas las vicisitudes por las que ha pasado la clausura del vertedero desde que se impulsara el proyecto en 2008. El Ajuntament solicitó a la Unión Europea una subvención para ejecutar el proyecto de cierre y la recuperación.
Deficiencias
El proyecto se adjudicó a la baja a una empresa especializada y a finales de 2010 se dio por clausurado. Pero tras una serie de denuncias de movimientos de tierras se abrió una investigación y desde el Govern se detectaron una serie de deficiencias que obligaron a redactar un nuevo proyecto subsanando las deficiencias técnicas. Entre ellas se hablaba de que la inclinación del talud y el drenaje de las aguas pluviales no era el adecuado.
Todo ello provocó que el Ajuntament tuviera que solicitar una prorroga a la Unión Europea para justificar la finalización de la clausura.
Durante todo estos años han surgido discrepancias entre los responsables de la empresa y el Ajuntament que ha tenido que asumir, de momento, el proyecto de subsanación, con independencia que después se pueda abrir un proceso para depurar responsabilidades.
El Ajuntament, de todas maneras, ha previsto en los presupuestos de 2013, recientemente aprobados, una partida de unos 950.000 euros destinados a la realización de este proyecto de clausura.
Ahora todo queda en manos del Ajuntament que deberá respetar los plazos y ejecutar el proyecto.