La asociación ecologista Gob ha tildado hoy de «esquizofrénica» la actitud del alcalde de Campos, Sebastià Sagreres, porque a la vez que dice acatar la sentencia que le obliga a demoler los apartamentos ilegales de Ses Covetes «no para de poner recursos» contra la orden del Tribunal Superior de Justicia (TSJB).
En un comunicado, el Grupo Balear de Ornitología y Defensa de la Naturaleza (Gob) recuerda que «quedan cien días para el derribo de Ses Covetes» y alerta de la intención del consistorio de Campos de modificar las normas subsidiarias urbanísticas para declarar urbanos los terrenos en los que se levantaron los apartamentos.
Pero «no hay duda, los terrenos no son urbanos», indican los ecologistas, según los cuales «la Ley de Costas lo deja claro y así lo reflejan buena parte de las resoluciones y sentencias que acompañan todo el largo proceso de Ses Covetes».
El Gob insiste en denunciar que el alcalde Sagreras «continúa dedicando esfuerzos y recursos para mantener en pie los apartamentos de Marina Ernst, de la cual su padre es el principal propietario».