El Comité Regional de Derechos y Garantías del Partido Popular ha aprobado por unanimidad la expulsión del partido de los siete regidores del Ajuntament de Manacor que apoyan al alcalde Antoni Pastor.
Ayer por la tarde, los ediles Catalina Riera, Francisca Rufiandis, Maria Bover, Sebastiana Sureda, Maria Magdalena Sureda, Roberto Flores y Cristina Matamalas recibieron la notificación. Ahora tendrán 15 días para presentar alegaciones si así lo desean.
Así, Pastor y sus siete concejales fieles han roto cualquier vínculo con el PP que ahora sólo contará con tres únicos regidores –Antoni Sureda, Llorenç Bosch y Antoni Servera– y en la oposición.
La expulsión viene motivada tras la decisión de la Junta Gestora del PP de Manacor de aupar esta medida al Comité de Derechos y Garantías, una vez el pasado 2 de julio se reestructuraba el equipo de gobierno del alcalde dejando sin cartera a Sureda, Bosch y Servera.
Argumentos
«Para evitar daños mayores al Partido Popular y a los intereses de los ciudadanos de Manacor». Éste es el argumento que ha esgrimido dicho comité para formalizar la expulsión. A ello hay que añadir que los ahora ex ediles del PP apoyaron «al alcalde que en esa fecha ya se encontraba suspendido cautelarmente de militancia por tener abierto un expediente disciplinario de partido en su contra».
Ante este nuevo escenario, se prevé que en el próximo pleno del Ajuntament de Manacor previsto para el mes de diciembre, el alcalde Pastor y sus siete regidores formalicen la creación de un grupo municipal propio. Ello permitiría que Antoni Sureda, Llorenç Bosch y Antoni Servera puedan dejar ser regidores no adscritos para crear el grupo municipal del Partido Popular de Manacor.
Hay que recordar que el próximo 1 de diciembre, el PP de Manacor oficializará la creación de su nueva junta local que presidirá Onofre Ferrer como presidente de consenso. Como vicepresidente tendrá a Antoni Sureda y como secretario general a Pedro Rosselló quienes, junto con 21 vocales, impulsarán una nueva etapa del partido.