El menor de edad que quemó junto a un joven el coche del alcalde de Sóller, Carlos Simarro (PP), ya está condenado. Apenas dos días después de ser detenido el acusado aceptó la imposición de un año de libertad vigilada, cien horas de trabajos en beneficio de la comunidad y una orden de alejamiento del alcalde. El menor no podrá estar a menos de 300 metros de Carlos Simarro ni comunicarse con él por cualquier modo durante un periodo de tiempo de dos años. El acusado manifestó también en el juicio su intención de pedir disculpas al alcalde por lo ocurrido. Para salvar la paradoja de que el condenado se disculpe pese a la orden de alejamiento, la Fiscalía de Menores supervisará un encuentro como parte de las medidas de reeducación que se aplican al menor.
El Juzgado de Menores número 1 de Palma celebró ayer un juicio rápido contra el menor que cierra el caso para él. La defensa de éste y la Fiscalía de Menores acordaron la serie de medidas cautelares a imponerle como castigo por delitos de incendio y de atentado. Éste último porque se entiende que el menor actuó con la intención de intimidar a Simarro.
Lo que queda aún por definir en relación con este acusado es la responsabilidad civil. Ésta se establecerá durante la ejecución de la sentencia cuando se establezca la cuantía de los daños causados al coche del alcalde. Serán los padres los que tengan que hacer frente a esta cantidad económica que, en todo caso, si el otro joven detenido es condenado se dividiría entre ambos.
De esta forma queda pendiente la causa contra el joven de 20 años que también admite ser autor del incendio y que ayer ingresó en prisión.