A puesta de sol, la playa de s'Illot se convierte en un agradable espacio de diversión en el que familias enteras o grupos de amigos cenan al aire libre sobre la arena, en una de las ediciones más multitudinarias que se recuerdan.
Unas dos mil personas participaron el pasado viernes por la noche de una nueva edición de la ‘sombrillada' nocturna, uno de los actos más originales de las fiestas de la Mare de Déu de este núcleo costero de Manacor.
Sombrilla en pie y hasta algunos con carpas, desde las nueve de la noche se iban montando mesas y sillas con mucho colorido para disfrutar de la noche.
Aunque algunos se conformaron con la cena típica de bocadillos y toallas, la mayoría montó mesa y sillas y comieron trempó, coques, empanadas, ensaladilla, tumbet e incluso algunos se atrevieron con una porcella al horno entre otros selectos manjares.
Originalidad
Desde hace unos años, los s'illoters han convertido sus fiestas en un referente festivo. De hecho, la ‘sombrillada' ofreció, en definitiva, una excelente manera de divertirse al fresco con familiares y amigos.
Así, las fiestas de la Mare de Déu d'Agost concluirán hoy a medianoche con el tradicional castillo de fuegos artificiales en la zona marítima, un espectáculo que congrega a una multitud.