Una treintena de propietarios afectados por las expropiaciones de la ronda Nord de Inca solicitarán al Consell que no ejecute la segunda fase de la variante, que discurre entre la carretera de Selva y las viviendas de Can López. «Tenemos dos razones fundamentales, una económica y otra de sentido común y es que desde que se abrió la ronda sur apenas pasan vehículos por esta zona», explican los vecinos que anuncian movilizaciones.
El próximo 24 de agosto finaliza el plazo dado por el departamento de Carreteres del Consell de Mallorca para presentar alegaciones al proyecto que se ejecutará en dos fases, la primera de las cuales va desde la rotonda de la Ford hasta la carretera de Selva y, la segunda, desde la carretera de Selva hasta las casas de Can López.
Discrepancias
Es en este último tramo en el que existen ciertas discrepancias. La última modificación que ha sufrido el proyecto contempla alargar la vía algo más de un kilómetro, desde el colegio Miquel Duran i Saurina hasta las casas de Can López. Una treintena de vecinos opina ahora que esta prolongación es «cara e innecesaria», además de que «afecta a muchas fincas, pequeñas pero importantes para nosotros». Así, los vecinos pedirán al Consell que mantenga el proyecto inicial que desemboca junto a la escuela.