El Ajuntament d'Artà ha impulsado un plan ambiental y ha tomado una serie de medidas contundentes para mejorar la gestión de los residuos. Una decisión que viene justificada a raíz de las quejas vecinales sobre el servicio de recogida de basuras.
En el pleno ordinario se aprobó una moción del PSOE, en la oposición, para instar al equipo de gobierno a elaborar un nuevo pliego de condiciones para llevar a cabo la recogida selectiva.
El regidor de Medio Ambiente, Guillem Caldentey, explicó que «nosotros nos abstuvimos pero somos conscientes de que hay muchas quejas sobre este servicio y lo que tenemos muy claro es que si hay una renovación con la empresa actual será muy condicionada al estricto cumplimiento de lo establecido en el contracto. Analizamos diferentes opciones».
Por otro lado el Ajuntament ha puesto en marcha una campaña de concienciación ciudadana en la Colònia de Sant Pere. Se han repartido más de 1.000 folletos con toda la información necesaria para el correcto reciclaje. Se recuerda a los vecinos que el incumplimiento de la ordenanza de limpieza puede estar sancionado con multas de hasta 2.000 euros.