Las sanciones económicas impuestas por incumplir las normas de civismo recogidas en la nueva Ordenanza de Convivencia Ciudadana de Capdepera se podrán substituir por trabajos a la comunidad, por sesiones formativas o por la participación en actividades cívicas.
Así lo ha establecido el Ajuntament para asegurar que todas las conductas incívicas serán penalizadas. Cada hora de medida equitativa o reparadora equivaldrá al importe de 10 euros de multa.
El Ajuntament de Capdepera aprobó en pleno esta nueva ordenanza para preservar el espacio público y evitar todas aquellas conductas que puedan perturbar la convivencia además de minimizar los comportamientos incívicos que se puedan realizar en el espacio público.
Por primera vez también se unifican las sanciones. Si se trata de infracciones leves el importe es de 60 hasta 750 euros. En el caso de infracciones graves, de 750 hasta 1.500 y cuando las infracciones sean calificadas de muy graves entonces la multa puede ir de 1.500 hasta 3.000 euros.
El regidor de Hacienda, Sebastià Sureda, explicó que «esta ordenanza es necesaria para regular las actuaciones de convivencia. Incluye temas como la venta de coches en la calle, la venta ambulante, pancartas, grafitis y todo el tema del botellón que por primera vez ya se podrá aplicar a extranjeros. En la ordenanza también se ha recogido la posibilidad de cambiar las multas pecuniarias por servicios a la comunidad. Así los insolventes podrán reparar su actuación con esta alternativa».
La ordenanza se divide en 15 capítulos que se refieren a atentados contra la dignidad de las personas, degradación visual el entorno, publicidad dinámica, realización de necesidades fisiológicas, entre otras.
También hay una apartado muy importante dedicado a la regulación de los ruidos y también de las normas en las playas. Así por ejemplo se prohíbe el uso de aparatos de música en las playas cuando molesten a los otros usuarios. También se prohíbe pisar las dunas y destruir la flora o fauna del ecosistema del litoral.