El alcalde de Manacor, Antoni Pastor, ha destituido al regidor Antoni Servera como representante del PP en la Junta de Distrito de Porto Cristo por sus continuos desplantes a sus socios de gobierno de AIPC. Servera, que es el presidente de la junta local de los populares en el núcleo costero se mantendrá, de momento, como regidor de Turismo del Consistorio.
Así, Servera ya no estuvo presente en el pleno de la Junta de Distrito, celebrado el pasado martes, y que preside el propio alcalde como presidente de este organismo. Una entidad creada a instancias de AIPC que ha ostentando el poder en el núcleo costero desde 2003.
Pastor tomó esta decisión a finales de la semana pasada tras varios episodios de enfrentamientos continuados entre el propio Servera y el líder de AIPC, Joan Gomila. Las disputas políticas entre los independientes de Porto Cristo y el PP porteño son históricas.
Tensión
De hecho, los populares de Porto Cristo no acabaron de encajar que Pastor pactara este mandato con AIPC a pesar de haber conseguido mayoría absoluta. En su momento, el alcalde defendió la reedición del pacto como agradecimiento al apoyo de los independientes al PP durante los dos pasados mandatos en los que Pastor no gozaba de mayoría en el Ajuntament de Manacor.
Fruto de todo ello y de que Servera está alineado con las tesis de José Ramón Bauzá, junto con el edil y senador Llorenç Bosch, contra Pastor, es lo que ha enfriado la relación entre las partes y ha enrarecido el clima en el seno de la junta local de Manacor y ahora también en el equipo de gobierno.
Además hay que añadir que Servera, junto con Bosch, fueron los dos únicos de los once regidores del PP que votaron contra las alegaciones a la modificación de la Ley de la Función Pública del Govern que relega a simple mérito y no a requisito el conocimiento del catalán para acceder a la administración pública. Su voto en contra fue calificado por Pastor como una «decepción» aunque defendió el derecho a la libertad de voto en esta cuestión.
Esta decisión de Pastor acrecentará las tensiones entre los fieles al alcalde de Manacor con los de Bauzá. Una situación que se escenificó el pasado miércoles con la visita de Bauzá a la sede popular de la ciudad, donde éstos arroparon al president del Govern y del PP balear como una muestra para poner a prueba las fuerzas de cada sector.