Sóller entró ayer noche en fiestas con el acto de investidura de las Valentes Dones del 2012, Terean Sebastián y Auba Amengual y la lectura del Pregó pronunciado este año por Antoni Frau. Al inicio de las celebraciones, que el lunes culminarán con el gran simulacro del Firó, asistieron diversas autoridades e invitados, así como una gran cantidad de vecinos que no quiso perderse el acto más solemne de las fiestas.
Presidían las autoridades locales, encabezadas por el alcalde, Carlos Simarro, y el resto de la corporación. También asistieron como representantes del Govern y del Consell, respectivamente, el conseller de Agricultura, Medi Ambient i Territori, Biel Company, y la consellera insular de Hisenda i Funció Pública, Margalida Roig. Por parte de los ayuntamientos de Fornalutx, Deià i Bunyola estaban sus respectivos alcaldes, Joan Albertí, Jaume Crespí i Jaume Isern. Siguiendo con la tradición la comitiva entró solemnemente en el templo parroquial precedida por la barra de Can Tamany acompañada de los xeremiers.
Dentro de la iglesia el público recibió la entrada de las Valentes Dones con grandes aplausos. Detrás del resto de personajes, entraban Terean Sebastián y Auba Amengual del brazo de Biel Company y Carlos Simarro. Completaban la comitiva las Valentes Dones infantiles, Marta Riutort y Aina Alcover. El pregonero, Antoni Frau Oliver y las Valentes Dones del 2011, Catalina Pomar y María Magdalena Deyà.
Después de recibir las distinciones del cargo y del intercambio de saludos entre las principales protagonistas, el empresario Antoni Frau, procedió a leer su discurso. Muy popular en Sóller, entre sus numerosas actividades ha vivido muy de cerca las fiestas, sobre todo en la etapa en que encarnó el personaje de Capità Angelats. Este hecho le permitió hablar de la fiesta en primera persona, en un discurso que destacó por su lenguaje llano y directo, sin casi ninguna referencia crítica ni reivindicación a excepción de reclamar más atención hacia el mundo rural actualmente en vías de desaparición. Fue presentado por su predecesor, Francesc Lladó. Frau basó su discurso, sobretodo, en recuerdos personales de las fiestas pero también de los oficios, industrias y personajes hoy ya desaparecidos del Valle.