Antiguamente, en fora vila vivía mucha más gente que ahora y, era habitual que en las possessions y en los llogarets hubiera iglesias o oratorios. Hasta no hace demasiados años, la iglesia de Son Negre, en Felanitx, se daba misa los fines de semana y fiestas, pero la carencia de vocaciones y de gente en las aldeas hace que estos pequeños templos sólo abran las puertas en ocasiones excepcionales.
Por ello ahora durante las fiestas de Sant Antoni, patrón de Son Negre y, estas últimas semanas se han celebrado toda una serie de actos: fogueró, beneïdes o una comida popular y los vecinos han aprovechado para montar una tómbola para recaudar fondos para poder realizar obras de mejora y conservación de la iglesia que pronto cumplirá los 200 años y a la cual los vecinos de tota la vida le tienen mucha estima.
Y es que tras el éxito del año pasado, con el dinero de la tómbola pudieron arreglar las goteras del tejado, y este año tienen previsto destinar la recaudación a remendar la puerta de la entrada entre otras cosas.