Sr. Santiso,
Como responsable del Servicio de Urgencias y UCE del Hospital de Manacor (SU) he liderado un proyecto que concebía un SU con una visión excelente , innovadora y con una actitud de mejora continua en la calidad asistencial. Los objetivos que nos planteamos al inicio del mismo han sido alcanzados como lo demuestra el haber sido uno de los primeros Servicios de Urgencias del Servicio Nacional de Salud en ser certificado por la norma ISO-9001 y el haber quedado finalista en los premios Best in Class en 2009 y 2011.
Esta labor ha sido fruto del trabajo de un extraordinario equipo al que pertenezco y del cual me siento especialmente orgulloso. Muchos profesionales sanitarios (médicos y de enfermería) han dejado sus mejores años profesionales en este empeño.
Actualmente la dirección de este Hospital se ha convertido en una mera correa de transmisión de una dirección general del Ibsalut que actúa centrada en el ahorro a toda costa sin tener en cuenta el principio básico de que los servicios sanitarios deben estar centrados en el paciente. Confunden, en mi opinión, ahorro con eficiencia. La eficiencia es obvio que se relaciona con el coste, pero se les olvida que también lo está con la eficacia.
Si únicamente hablamos de ahorro, a modo de ejemplo, el SU esta ahorrando al Ibsalut desde hace 14 años un Punto de Atención Continuada (PAC) en Manacor, siendo el único Hospital de la isla que funciona como PAC durante 12 horas al día. Esto significa haber ahorrado, como mínimo, durante este tiempo el sueldo de 5 médicos, 5 enfermeras y 3 celadores, sin entrar en detalles de lo que puede haber supuesto el gasto corriente de capítulo 2 que genera la actividad habitual de un PAC. Y si hablamos de eficiencia, a pesar de asumir funciones de PAC que no son propias de un Servicio de Urgencias Hospitalario, en un estudio realizado en el SU (galardonado con el premio Damià Carbó 2010 del Colegio de Médicos) se demostró que la atención sanitaria en nuestro Servicio cuesta menos de lo que estipula el Ibsalut para la atención urgente hospitalaria de nuestra Comunidad Autónoma.
En un momento de aumento generalizado de las listas de espera, el desestructurar la auténtica válvula de seguridad del sistema sanitario que representa el SU puede, a mi entender, originar serios problemas en la correcta atención urgente a la población que atendemos además de generar una peligrosa disfunción entre los profesionales que integran el Servicio.
Por todo lo expuesto le comunico que, con los nuevos criterios oganizativos, no puedo participar por coherencia profesional en este nuevo modelo de gestión ni responsabilizarme en estas condiciones de una correcta atención urgente hospitalaria. En consecuencia, presento mi renuncia a la jefatura del Servicio de Urgencias y UCE.
Pere Serra Simó,
Manacor, 31 Enero 2012