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La Unió Musical acepta in extremis tocar en Reyes pero reclama «dignidad»

El alcalde Torres trató de justificar los recortes y se disculpó con los músicos. | Elena Ballestero

| Inca, Mallorca |

La Unió Musical Inquera cumplió con el programa del concierto de Reyes y actuó ayer noche a partir de las 20 horas en la iglesia de Santa Maria la Major.

Los miembros de la Unió Musical acordaron in extremis a las 19:30 horas a petición del director de la banda, Miquel Genestra, asistir al concierto programado con el Ajuntament pese a que el Consistorio ha denunciado el convenio que mantenía con la agrupación anunciando un recorte presupuestario de 40.000 euros.

La Unió Musical había lanzado un órdago convocando al alcalde, Rafel Torres, en la tarde de Reyes a comparecer en el ensayo previo al concierto para dar cuenta de los recortes presupuestarios y someterse a una batería de preguntas de los músicos que en función de la reunión decidirían si tocaban o no.

Comparecencia

Pasaban pocos minutos de las seis cuando el alcalde Torres compareció en el local de la Unió Musical junto a la regidora de Cultura, Maria Payeras, que apenas intervino en la discusión.

El alcalde pidió disculpas a los músicos por haber denunciado los convenios de financiación que tenían vigentes el 31 de diciembre sin aviso previo, lo que provoca un importante problema a la Unió Musical dado que las cuotas que pagan los alumnos de su escuela de música están establecidas desde septiembre en función de los ingresos previstos, ingresos que ahora se verán reducidos.

«Nos hemos equivocado haciéndolo el último día, era algo que desconocía y lo siento», dijo el alcalde, que no dio demasiadas esperanzas sobre la cuestión económica.

«No puedo prometer un dinero del que no dispongo. La subvención de la banda se recortará un 50 por ciento pero podemos negociar el recorte en la escuela», dijo.

Los músicos dijeron sentirse «discriminados» frente a la escuela municipal de música que ha visto disminuido su presupuesto en un 16 por ciento, una cifra muy alejada del recorte del 50 por ciento anunciado en su caso. Pidieron ser tratados con «dignidad». Denunciaron la actuación «indigna» del Ajuntament y decidieron acudir al concierto «porque sería indigno no hacerlo».

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