Ante las vicisitudes económicas que atraviesan las corporaciones locales caben dos actitudes: el lamento desconsolado o arremangarse y hacer de la necesidad virtud. Por la segunda opción ha optado el alcalde de Estellencs, Bartomeu Jover (PP).
Llegado el momento de instalar la iluminación navideña, el Ajuntament d'Estellencs se encontró con que la brigada municipal, encargada de colgar las luces, se encontraba en cuadro. De los tres miembros que conforman la brigada, uno estaba de baja, otro de vacaciones y el tercero, cedido por el Servei d'Ocupació de les Illes Balears (SOIB), ya había rescindido el contrato laboral que le ligaba con el Ajuntament.
Manos a la obra
Ante este panorama, el alcalde decidió el lunes que él y su equipo de gobierno suplirían a los miembros de la brigada municipal y serían ellos quienes instalarían la iluminación navideña. De esta manera, entre el lunes y el martes, Jover y otros tres regidores ‘populares' se pertrecharon de los vehículos preceptivos y las herramientas necesarias y se pusieron a colgar rótulos, luces y guirnaldas en algunos árboles.
Completaron una instalación lumínica que este año, debido a las estrecheces económicas, has sido menor que en otras fiestas. En esta ocasión no se han alquilado adornos y se ha echado mano exclusivamente del material que el Consistorio tiene en propiedad.