Unas 200 personas participaron ayer en la segunda subida al Molí des Castellet, en Calvià, para pedir «la consolidación de este bien catalogado, su urgente restauración, el derecho histórico a acceder a la zona como lugar simbólico y la eliminación de la barrera del camino».
La Comissió pro-molí des Castellet, compuesta por distintas entidades, ha pedido al Ajuntament de Calvià «un paso público hasta este bien etnológico ya que para los ciudadanos de Calvià tiene un arraigo histórico, simbólico y referencial».
Los organizadores han avisado de que «la estructura del molino presenta deficiencias y corre el peligro de que se pueda derrumbar». Por ello instan al Consistorio calvianer a que actúe «con responsabilidad y eficacia para no perder un elemento tan singular».
Consideran importante que el Ajuntament «negocie con la propiedad del molino para que se pueda restaurar el elemento».