Los presupuestos municipales para 2012 prevén un recorte de un 30 por ciento del gasto que se asigna a cada departamento, unas futuras cuentas que han sido calificadas por el alcalde Antoni Pastor (PP) como «muy restrictivas».
La bajada de ingresos, que ya es la tónica general de los últimos años, el retorno de 1,2 millones al Gobierno del Estado por un tema de liquidaciones y los más de tres millones de euros que adeudan el Consell de Mallorca y el Govern al Consistorio han obligado a tomar estas medidas de contención.
Por ello, Pastor ha anunciado un recorte medio del 30 por ciento del gasto de todas y cada una de las delegaciones municipales. «Pensamos que son necesarias estas medidas, sobre todo porque no queremos sorpresas y además necesitamos liquidez para el día a día».
A esta medida hay que añadir la ya conocida eliminación de las luces de Navidad, que suponen un ahorro de más de 70.000 euros, y la reducción de un 40 por ciento de la intensidad de la iluminación de avenidas y calles, así como de edificios que a día de hoy se cifra en un ahorro diario de 600 euros con la previsión de aumentar hasta los 1.200.
Además, el Patronat de Sant Antoni pasará a recibir sólo 13.000 euros, por los 18.000 que eran costumbre, para celebrar sus actos. También se recortan 70.000 euros más en uniformes para la Policía Local y 14.000 más para adquirir ordenadores.